Hace apenas unos días recogíamos la triste noticia del fallecimiento de Selma Huxley, la investigadora que dio a conocer al mundo, en toda su magnitud, la gesta de los balleneros vascos en Terranova y Labrador.
Hoy publicamos esta entrada de Crónicas vascas, recogiendo el relato en el que el dibujante e ilustrador barakaldes Guillermo Zubiaga, nos cuenta la relación que existe entre su serie de cómics «Joanes or the Basque Whaler» y los descubrimientos de la investigadora anglo-canadiense.
Guillermo Zubiaga ha pasado la mayor parte de su vida en los Estados Unidos, donde se ha formado y ha desarrollado su carrera como dibujante e ilustrador. Tras realizar sus estudios en la ikastola Lauro de Loiu, a los 18 años marcha a Estados Unidos, graduándose en Bellas Artes en la Universidad neoyorkina de Syracuse. La temporada previa a su diplomatura trabajó para un estudio local de dibujos y animación, Animotion, inc. Tras la graduación comenzó a trabajar en la industria del cómic como dibujante de fondos. Consiguió trabajar para la Marvel cómics en el titulo X-FORCE. En 2003/04, trabajó como entintador en titulos B.P.R.D. para Dark Horse cómics y en la novela Graphica The Romp de Image comics.
Publicó la primera trilogía dedicada a Joanes, el ballenero vasco, entre 2009 y 2014. Una serie de la que hemos hablado aquí en varias ocasiones. Lo hizo en inglés, aunque luego también tuvo ediciones en euskera y castellano
Ahora, en diciembre de 2019, ha iniciado la publicación de su segunda trilogía sobre este personaje. También, como la primera, con el apoyo del Centro de Estudios Vascos de la Universidad de Nevada, Este ejemplar se ha publicado 10 años después del inicio de la serie.
Al respecto de esta cuarta entrega, titulada Traganarroo’s revenge ( La venganza de Traganarru) hay una pequeña «intro« realizada por Blas Urberuaga, de Buber’s Basque page, que es una de las referencia básicas en el mundo de la cultura vasca en internet
«Un capitán con poca suerte, Joanes vende su alma a un demonio marino, el Traganarru, por un txalupa mágica, que vuela junto su tripulación a nuevas costas llenas de ballenas.
Después de una exitosa y lucrativa carrera que lleva a Joanes a las Américas, su arrogancia lo lleva a desafiar al demonio marino, que les encierra.
Un siglo de prisión más tarde, Joanes finalmente libera a su tripulación, sin embargo, ahora las principales potencias navales están asediando la flota pesquera vasca. Convirtiéndose en sacerdote, nuestro protagonista monta una guerra santa, aunque, inservible contra británicos, daneses y otras potencias.
Parece que su tiempo ha pasado, Joanes escenifica su propia muerte, y queda enterrado bajo circunstancias misteriosas con un humilde marcador en su tumba en una solitaria isla en Terranova. El único monumento a su historia»… Hasta el momento claro!
En relación con la Muerte de Selma Huxley-Barkham. «Por Selma»
Guillermo Zubiaga
Cuando decidí escribir y dibujar mi propia historia, tenía claro que debía ser sobre un tema vasco. Elegí el tema de los balleneros vascos por eso, porque me parece un genero genuinamente vasco, equivalente a las historias de Cowboys en EEUU, las sagas vikingas en Escandinavia o las narraciones de samurais en Japon. En otras palabras me parece el auténtico género de “western” vasco.
Desde muy temprana edad en Bakio, donde pasé los primeros 5 o 6 veranos de mi infancia, recuerdo estar fascinado por el mar y más concretamente por la repetida imagen de la ballena en los innumerables escudos de armas de los muchos pueblos en nuestra particular costa. Creo recordar que un cachalote fue a morir en la playa y estuvo cantando algún rato…. Sin embargo, no fue hasta mucho más tarde, ya aquí en América y durante la universidad, cundo finalmente me concentré en nuestros balleneros, y tomé conciencia de la posibilidad de hacer algo para en el mercado estadounidense pues también empezaba a hacerme la idea de que pudiera quedarme aquí “algún tiempo”.
Consideré un abanico de posibilidades desde un compendio de mitología vasca o mi versión de la batalla de Orreaga/Roncesvalles, (en fin, la lista es larga pues falto de ideas no estaré jamás.) Aunque reconozco que fue fácil decidirme porque, como comentaba, siempre he sentido una especial atracción por las historias de nuestros antiguos balleneros. Pero hubo alguien y algo que me empujaron en ese camino.
Recuerdo cómo tome esa decisión. Yo aún de estudiante universitario mientras trabajaba para un estudio de dibujos animados ( Animotion.Inc) Un día, uno de los trabajadores (Aaron Macdonald) trajo una caja repleta de números de National Geographic, y fue con la edición de julio de 1985 de esta revista, por el que me decidí por una historia de balleneros.
En él se recogía un serie de 4 artículos sobre la presencia de los balleneros vascos en Norteamérica durante el siglo XVI, y sobre el descubrimiento del pecio del ballenero vasco, San Juan.
Artículos de la revista dedicados a los balleneros vascos:
16th- Century Basque Whalers in America { Excavating a 400- year- old Basque Galleon}
Archaeologists James A. Tuck and Robert Grenier describe the discovery of a 400- year- old whaling station and sunken ships.
16th- Century Basque Whalers in America { Unearthing Red Bay’s Whaling History}
James A. Tuck excavates centuries- old Basque whaling stations at Red Bay on Labrador’s coast.
16th- Century Basque Whalers in America { Discovery in Labrador: A 16th- Century Basque Whaling Port and Its Sunken Fleet}
Among the first to reap treasures of the New World, Basque voyagers made the Labrador coast the center of a booming oil industry. Photos by Bill Curtsinger and paintings by Richard Schlecht.
16th- Century Basque Whalers in America { The Indomitable Basques}
Robert Laxalt traces the Basques’ history and long record of exploration.
Podemos decir que la lectura de estos artículos fueron los que me llevaron a crear esta serie. Y nada de esto hubiera sido posible, ni los descubrimientos, ni el nacimiento de «Joanes or the Basque Whaler», sin el trabajo y las investigaciones de Selma Huxley.
Si además consideramos la existencia de una supuesta, o disputada, temprana presencia de los vascos y el euskera en América (según quien, antes de que llegase Colón), el tema en sí está envuelto por una aureola de misterio. Por eso, no hay duda de que el contenido se presenta ya una joya para la épica.
Sin duda uno de los más espectaculares descubrimientos, en este ámbito predilecto mío, es el del pecio del galeón San Juan en Red Bay ( puerto conocido en su día como Butus). Un ballenero que, de forma fiel, está devolviendo a la vida Xabier Agote de Albaola en el puerto vasco de Pasajes. Conocer su existencia y su importancia me confirmó toda una serie de sospechas que yo tenia sobre el tema, y acabó de encender en mi la chispa que puso en marcha la concepción y posterior realización del estas novelas gráficas con los balleneros vascos como protagonistas.
También, tras mi personaje se esconde otro descubrimiento clave de aquella historia de vascos y de aquella parte del mundo: uno de los testamentos más antiguos conservado en Canadá. El de Joanes de Etxaniz, un pescador de ballenas oriotarra que falleció en aquellas aguas en 1584.
Si. Se trata de uno de los tres documentos escritos más antiguos de Norteamérica. Los otros dos también son testamentos y también son de arrantzales vascos: el de Juanes de Larrume de 1577, y el recientemente descubierto por Michael Barkham, (el hijo de Selma ) de Domingo de Luça, del año 1563.
Estos documentos, junto con las pruebas arqueológicas irrefutables, aportan una muy valiosa evidencia documental de la temprana presencia de nuestros antiguos balleneros en Norteamérica.
El que el protagonista de estas historias tuviera como nombre Joanes parecía, por lo tanto, casi obligado. Mas aún si tenemos en cuenta que este nombre aparece de forma reiterada en múltipes documentos tales como los cantos de Joanes D’Etxeberry, «Balearrantzaleen otoitzak», o la historia del ballenero Joanes Balaztena de Aita Barandiaran. Por lo que el nombre no podía haber sido otro.
En definitiva, las aventuras de «Joanes or the Basque Whaler», la historia que llevo desarrollando ya durante 10 años y que recoge una gesta de vascos en unas costas y unos tiempos muy duros, es en buena parte consecuencia del trabajo de esta gran estudiosa y gran amiga de los vascos Selma Huxley. Por eso «Joanes», como todos los vascos, le debe mucho a esa mujer.
Su marcha es una gran perdida. Y su nombre siempre estará unido a una de las grandes epopeyas de nuestra historia.
Bihotz bihotzez eskerrik asko beti, agur eta Ohore, goian bego
Agur zintzoena
Donde conseguir las historias ilustradas de Joanes el ballenero vasco:
Página del Centro de Estudios Vascos de La Universidad de Nevada Reno: Aquí
Elkar.eus: Aquí
Si alguien desea una copia firmada (o personalizada), pueden enviar un correo electrónico al autor.
Imagen principal: Escena de «Joanes or the Basque wahler» de Guillermo Zubiaga
Last Updated on Jun 28, 2020 by About Basque Country